… y de paso me metes algo de porno

Me acabo de acordar de esta historia que merece la pena contar por lo anecdótico del caso. Además de ser suministradores de tecnología, parece ser que hay quien piensa que además también lo somos de otras cosas más… picantes.

Situémonos. Tenemos como protagonista a un cliente un tanto peculiar. De esos que habría que verlo para saber a qué me refiero (al igual que pasaba con el de esta entrada). Baste decir que las primeras veces que venía a la tienda teníamos que poner toda nuestra atención a lo que decía porque tiene una forma de hablar un tanto especial. Ahora, cuando viene y hay algún otro cliente esperando, después nos preguntan cómo lo hacemos para descifrar su código verbal. Yo siempre respondo que es cuestión de cogerle el tranquillo.

Pues bien, este cliente atípico hace un tiempo nos compró un reproductor de mp4  de 2 gigas (ampliable mediante tarjeta SD). Como buen heavy nos comentó que al no tener ordenador necesitaría que le pasáramos varios CDs originales del grupo AC/DC a formato mp3 y le metiéramos esos archivos en el reproductor.

Al cabo de un tiempo vuelve a venir y nos trae más CDs, esta vez de Iron Maiden para que hiciéramos el mismo proceso. Era última hora de la tarde y estábamos en la tienda solamente mi novia (esperándome) y yo, aguardando unos minutos para recoger mis cosas, cerrar e irnos. Nos deja los CDs y el reproductor mp4 y quedamos en que viniera en unos días. Sale de la tienda y al cabo de un minuto vuelve a entrar y se dirige a mí:

– Eh, psssst, oye, ¿puedes venir un momento?

Me hablaba a mí desde la puerta, haciéndome gestos con la mano para que me acercara. Me adelanto un poco y me pongo a su lado.

– Eeeeemmmm, essss queeeee, puesssss te quería comentar que si…. si… ya que estás…. me podrías meter algo de porno bueno en el mp4 jejeje.

Me quedo patidifuso y le respondo:

– Pues mira, la única manera de que pudiera hacerlo sería que me trajeras la película original tú mismo y aún así llevaría demasiado tiempo y no podría hacértelo, que voy cargado hasta arriba de trabajo.

– Vale vale, no te preocupes, en otra ocasión quizás.

Se da media vuelta y se va.

Me vuelvo al mostrador y aguantándome la risa sin mucho éxito. Mi novia me mira y me dice:

– ¿Te ha pedido lo que he creído oír?

– Sí

Y nos empezamos a partir de risa los dos durante un buen rato.

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Juanjo

Me llamo Juanjo y en un sucinto resumen se podría decir que soy un informático adicto a las series, el cine y la lectura, además de apasionado por los ordenadores, móviles, gadgets, internet, videojuegos… lo que viene a ser un geek ;).