Tutorial para una limpieza básica del PC

Bueno, ya que nunca me he parado a escribir de verdad sobre el mantenimiento de la parte física del ordenador, creo que ha llegado el momento de hacerlo. ¿Cómo mantenéis impoluto vuestro PC? Seguro que muchos de vosotros lo hacéis con productos ideados para tal fin (Que es lo que hay que hacer), otros sin embargo, descubriréis en este mismo instante que los componentes del ordenador también se deben limpiar, mientras un pequeño grupo de “apañaos”, donde un servidor se incluye, utiliza únicamente los productos que se emplean para tareas de mantenimiento doméstico, más adelante veréis a lo que me refiero.

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Sí amigos, dado a que la gran mayoría de nosotros nos hemos tenido que ajustar el cinturón y hacer apaños con chinchetas, en el ordenador no iba a ser menos, y por esta razón, y porque se hace necesario hacer una limpieza de vez en cuando, voy a proponeros algunos pasos para limpiar vuestro ordenador de sobremesa.

Antes de comenzar con la exposición, me gustaría advertir que para realizar las siguientes tareas no se requiere de ningún conocimiento avanzado para poder efectuarlas, por lo que invito a todos a que lo probéis y aprovechéis para descubrir cómo son los componentes que hacen que todo funcione. Eso sí, si no sabéis que es lo que estáis haciendo, es mejor actuar en presencia de alguien que sí sepa como volver a cerrar la tapa o simplemente que lleve la cuenta de los tornillos extraídos, para que no os pase como me solía pasar a mí hace tiempo, que sacaba 6 y a la hora de montar me sobraban 7. Empecemos…

Paso 1: Preparando la mesa de operaciones

Leed todo el artículo y luego llevad a cabo los pasos sino queréis quedaros a medias. Apagaremos el PC, nada de suspender, apagar. Lo mismo con el router, los altavoces y el monitor, si contáis con regleta, apagadla también. Una vez esté todo off pasaremos a desconectar los componentes que por la parte trasera de la torre están enchufados: ratón, teclado, router, monitor, usbs y cualquier tipo de componente externo.

Ahora que ya está completamente desconectada de cualquier fuente de corriente, pondremos la torre encima de la mesa de operaciones, es decir, en el suelo. La giramos hasta tener de frente la parte trasera para trabajar con mayor comodidad y observaremos que tiene un par de tornillos, los quitamos y procedemos a retirar la tapa lateral. Ahora la tumbamos boca arriba.

Paso 2: Eliminando la porquería superficial

Si no habíais hecho esto antes, es probable que encontréis serpientes y culebras dentro de una gran selva de polvo, por lo que recomiendo estar preparados para cualquier tipo de sorpresa. Ojo, encontréis lo que encontréis, debe salir por su propia voluntad, bajo ningún concepto se ha de verter ningún tipo de sustancia química.

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Para poder eliminar toda la suciedad que estamos viendo, cerraremos la habitación en la que nos encontremos, pues la suciedad saldrá disparada por el suelo, ya que emplearemos el aire frío del súper secador que tenemos en el baño. Lo enchufamos a la corriente y con sumo cuidado y sin rozar ningún cable/componente, daremos aire hasta en los rincones y rendijas más escondidas. Lo normal es que una nube de polvo invada por unos segundos la torre, no te asustes, luego se barrerá.

Paso 3: Eliminando porquería no tan superficial

Ahora que hemos movido el polvo de lugar y ya vemos de qué marca son los componentes, es el momento perfecto de ayudarnos de un pincel de brocha medio gorda, digo medio gorda porque no tengo ni idea de cómo funcionan las medidas. A modo orientativo, yo utilizo una de unos 2 dedos de anchura.

Para poder limpiar el polvo bien, tendremos que dedicarle unos cuantos minutos y siempre sin rozar con el mango ningún cable o circuito. A pesar de que tendremos que pasarlo por todas las zonas que veamos, distinguiremos unas cuantas más importantes:

  • Ventiladores: Suelen estar atornillados al lateral de la carcasa de la torre. Aquí procuraremos ir pasando aspa por aspa sin miedo hasta eliminar todo el polvo. Para los más avanzados, recomiendo desatornillarlo y desconectarlo de la placa base, para quedárnoslo en la mano y poder realizar la operación mejor. Yo le pongo una gotita de aceite en el eje de las aspas para que giren mejor.
  • Placa base: Se trata de la placa de conexiones gigante donde se encuentra conectado todo. Sin desconectar nada, trataremos de repasar toda su superficie cuidadosamente y sin romper ninguna resistencia. Los más avanzados pueden desmontar cables y tarjetas para poder hacerlo cómodamente.
  • Disipador y su ventilador: Se trata del ventilador que se encuentra en el centro de la placa base, estará lleno de polvo y con la ayuda del secador y el pincel se podría eliminar el polvo superficial. Para un mantenimiento más preciso y efectivo, los avanzados en el tema pueden desatornillarlo, limpiar el ventilador y extraer el disipador. Una vez lo tengan en la mano, eliminarán cualquier suciedad y procederán a poner un poco de pasta térmica en la zona donde se apoya éste con la CPU. Es fundamental que si se extrae, se reponga la zona con pasta térmica y esta operación solo sea realizada por entendidos, que luego no quiero denuncias.

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Paso 4: Limpiando los periféricos

Aunque no lo creas, los altavoces y demás también cogen suciedad y debemos mantenerlos limpios. Ahora que ya tenemos libre de polvo la torre, pasaremos a éstos, pero para poder dejarlos completamente limpios, haré un pequeño repaso por cada uno de ellos:

  • El monitor: Hay productos especiales para ello, pero si no queremos gastarnos ni un duro o nos da pereza bajar a la tienda, yo utilizo un trapo no abrasivo, tipo el que se utiliza para limpiar las gafas, un poco de agua y alcohol. Frotando suavemente para no dañar la pantalla, poco a poco las marcas van desapareciendo. El alcohol hace que el mojado se evapore y no dañe nada. Ni se os ocurra utilizar el estropajo de fregar los platos.
  • Altavoces: No suelen complicarnos la vida. Cogemos un trapito humedecido con cualquier tipo de producto limpiador para toda clase de superficies e iremos frotando. Cuidado con las membranas, si se aprieta se hunden y se nos jode el invento.
  • El ratón: Trapito y multisuperficies para eliminar los rastros que encontremos en la parte superior. Abajo, si es de bola, la extraemos y la limpiamos, al igual que sus rodillos. Si es óptico, soplaremos y eliminaremos con un bastoncillo cualquier suciedad. Siempre procurando no tocar la lente, pues también se nos jodería el invento.
  • El teclado: Desconozco si existe un método más efectivo, y sabiendo que soplar no soluciona nada, siempre utilizo un pequeño destornillador para hacer palanca tecla por tecla. Siempre con muchísimo cuidado, aunque debo decir, que desde mi primer teclado he ido utilizando este método y todavía no he tenido ningún susto. Una vez retiradas las teclas, encontraréis pelos y migas del pleistoceno, es normal.

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Paso 5: Montar el ordenador y volver a la normalidad

Suele ser el proceso más largo y pesado, pues nos levantaremos de la mesa de operaciones y veremos que el suelo de la habitación está lleno de motas de polvo procedentes del interior de la caja del PC. Nos armaremos de paciencia y recurriremos a la tradicional escoba y fregona. Si tienes aspirador, mejor.

Ahora que ya está el suelo limpio, cogemos la tapa y recolocamos los tornillos, después, pasaremos a colocar ésta en su lugar y volveremos a conectar todo en los puertos de la torre. Si no se vuelve a encender el ordenador, no he sido yo, pero si lo hiciera, notaremos como ahora los ventiladores giran sin impedimentos y la habitación huele a nuevo, ya que deberías haber aprovechado el momento para recogerla entera, que falta le hacía.

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Andrés

Ingeniero informático en formación. Desde que nací con un ordenador bajo el brazo, consumo tecnología casi a diario. Me gusta escribir sobre aquello que merece la pena y me declaro fan incondicional del social media y la redacción.