Domingo dominguete, toca post cachondete.
Vía Apezz, web que os recomiendo y que con un poco de suerte se convertirá en el nuevo Menéame pero sin mafia (al menos eso espero), he encontrado este texto en el foro de burbuja.info que me ha hecho mucha gracia:
Antonio y Marisa son pareja desde hace años. Como no les gusta demasiado doblar la espalda, deciden dedicarse a la prostitución (sectores no industriales ni agrícolas).
Trabajan juntos y por separado, según lo que el cliente demanda. Como trabajan caro (baja competitividad) y no son muy buenos en lo del relax (falta de formación, i+d) y además viven en un apartamento cochambroso en un barrio malo (falta de infraestructuras y servicios), no tienen demasiados clientes.
Cuando llaman pidiendo griegos y franceses, como son unos garrulos, no saben de que se trata, y contestan que idiomas no hablan (falta de i+d)
Además, en el piso de abajo, hay un piso de extranjeras que trabaja por la mitad de dinero, y ofrecen la misma calidad: son chinas, checas, taiwanesas, etc. (deslocalización)
Como además son caprichositos y pijos, tiran de visa (endeudamiento y falta de ahorro)
Como no son muy buenos con las cuentas, deciden contar los polvos en vez de llevar la contabilidad. Al tiempo, se dan cuenta de que, a falta de clientes (pocas exportaciones), pueden contabilizar los polvos que hechan entre ellos, y además suben el precio, ya que una vez cobra ella y otra él, afirmando que así hacen más caja (PIB).
El casero, al que le deben 3 meses de alquiler, al oír tanto traqueteo, les va haciendo crédito estando seguro de que pagarán (cuentas del país maquilladas)
Al poco, Antonio le cobra a Marisa los huevos fritos a 100e y Marisa a Antonio la limpieza a 1000e/mes. Los cobros son astronómicos y se sienten boyantes (economía especulativa sin creación real de riqueza).
De vez en cuando, pasa un viejo millonario alemán que paga gustoso las excéntricas cifras que le piden por cualquier servicio, y eso les confirma que sus precios no están hinchados (burbuja inmobiliaria)
Antonio, que es un poco manitas, podría poner un bidé, pero al precio que pagan los huevos fritos, pasa olímpicamente del tema (gasto sin exportación ni infraestructuras)
Como hacen tanta caja, pero no tienen un duro, creen que no hace falta invertir en un video para poner pelis porno a los clientes (falta de inversión en bienes productivos)
Un día, corre la voz en el barrio que van mal de dinero (solvencia economía nacional). El banco les cancela su visa, el casero se empeña en cobrar y amenaza con deshauciarlos (restricción de crédito)
Desesperados, y sin entender nada, empiezan a plantearse que algo hacen mal. Tienen un amigo gestor y le llaman, éste, a la media hora de escucharles les ofrece una verdad demoledora:
Pese a una gran facturación (PIB) no tienen un duro. El problema es que en su apartamento ha salido más dinero del que ha entrado (balance de pagos con el extranjero). Al alemán le entró la crisis de los 60 y solo quiere ir con jovencitas (inversión extranjera a otros países), ya que no pueden ni plantearse contatar una jovencita que retenga al alemán (compra de tecnología extrangera)
-Además, pese al dinero que han gastado, no han invertido un duro en el cuchitril (infraestructuras) y todo ha ido bien mientras a Antonio le ha quedado paro (ayudas europeas). A la vez, han empeñado todo lo de valor (venta empresas españolas a internacionales)
-Teniendo tiempo libre, han pasado de estudiar otra profesión (reconversión) o estudiarse el camasutra (formación e I+D)
-Ahora, para comprar un pollo en el colmado de la esquina, tienen que chupársela al encargado. A ellos les parece que el pollo ha pasado de costar 5e entero a 30e que cobran la mamada (hiperinflación)
Para solucionar esto momentaneamente, el gestor les recomienda:
-Mucha austeridad (frenazo del consumo)
-Bajar precios de los servicios que prestan a los clientes (contención salarial)
-Aunque si quieren, por no sentirse pobretones, pueden multiplicar por 2 los precios de los servicios que se prestan entre ellos (burbuja inmobiliaria desbocada).
Cada dia la situación es más desesperada: Para sacarse de encima al casero, le hacen servicios gratuitos manteniendo la deuda y no le discuten incrementos en el alquiler (alargamiento de créditos, aumento de hipotecas y valor total de la deuda, tanto particular como estatal)
Para mantener las apariencias en el barrio, son unos fantasmas, piden al prestamista de la esquina, a intereses altísimos, y ni se atreven a pensar que pasará cuando no puedan pagarle (inyecciones del BCE)
Antonio y Marisa tienen un negro futuro, y se lo han ganado a pulso. En los próximos años, es probable que terminen viviendo en una barraca, que el prestamista les rompa alguna pierna, haciendo servicios a borrachos, vagabundos y drogadictos por un precio miserable en sucias esquinas, refugiándose en el vino de cartón para ahogar sus penas, y pasando hambre y frío.
