Al final ha resultado que los rumores eran ciertos y Nokia ha hecho lo que nos temíamos y a la vez esperábamos: después de 45 días de sacar al mercado su primer terminal táctil “Iphone killer” a un precio muy superior al que habían anunciado en un principio, le pegan un buen bajón. Si alguien lo ha comprado hace poco a la tarifa anterior seguramente se estará dando de cabezazos contra la pared pues la rebaja es de casi 100 euros: de 429 a 339 euros. Podéis verlo en la tienda oficial de la marca aquí.
Mi teoría siempre ha sido que mi odiada Movistar ha tenido mucho que ver con lo que ha sucedido a este respecto. Seguidamente os cuento mi idea conspiranoica:
– Nokia desarrolla el 5800 y cuando está a punto de comercializarlo se dice a los 4 vientos que el precio rondará los 300 euros. Todos los que lo estábamos esperando desde hacía tiempo empezamos a babear.
– Movistar consigue la exclusiva durante un mes, de manera que ninguna otra operadora lo puede comercializar en ese período.
– Movistar negocia con Nokia y les dice que eso de sacarlo a 300 euros ni de coña, si fuera así muchos clientes optarían por comprarlo libre antes que vincularse a la operadora por 18 o 24 meses. Queda mucho más bonito para ellos que salga a 400 y pico libre y así lo pueden ofrecer con un descuento muy interesante comparativamente hablando.
– Nokia se da cuenta de la gran cagada que hicieron anunciando un precio tan bajo, así que se sacan de la manga un pack: el que lo compre libre, tendrá 3 meses de suscripción a su servicio de GPS y canciones de su portal de música de manera gratuita. O no tanto, porque al fin y al cabo estás pagando más por algo que a casi nadie le interesa. Los que lo compren a través de Movistar no tendrán el pack, por lo que cabe concluir que a la operadora azul el móvil le sale más barato todavía.
– Movistar, muy contenta ella, ofrece este deseado terminal con unos descuentos que para ella son migajas pero que para el cliente supone un ahorro considerable comparándolo con su versión libre. Negocio redondo y muy lucrativo pues se consiguen numerosas altas con permanencia sin tener que subvencionar apenas el terminal.
– Una vez acabada la exclusividad Nokia empieza a abastecer a las otras operadoras sin problemas y pone el precio que tenía pensado en un principio.
Hasta aquí lo que yo creo que ha pasado, evidentemente no tengo ninguna prueba sino que es fruto del análisis que hago de todo lo que ha ido aconteciendo desde que el 5800 fue anunciado.
