Contaplus, Facturaplus, Eurowin y las politicas de los fabricantes de software

Acabo de leer esta entrada del Tendero Digital que se podría considerar una tesis doctoral de lo que está ocurriendo en el panorama del software propietario en demasiados casos.

En resumidas cuentas, el Tendero explica cómo algunos fabricantes de software creen que no es que ellos trabajen para sus clientes, sino que sus clientes trabajen para ellos. Cuenta el caso de un cliente suyo al cual se le rompió el disco duro de su portátil, y cuando fue a llamar a SAGE para solicitar la reinstalación del programa se encontró con la ya tan conocida actitud de esta empresa: o pagas la cuota de mantenimiento o te jodes.

disco_roto Claro, en estos casos no estamos hablando de juegos ni de programas chorras, estamos tratando con programas que son los encargados de llevar, nada más y nada menos, que la contabilidad y facturación de una empresa. Y hay dos cosas ciertas en esta vida: la primera es que todos nos vamos a morir algún día, la otra que de pagar a Hacienda no se escapa ni el apuntador. Así que juegan con la necesidad de su cliente, es como si te dijeran “mira chaval, la única solución que te doy para poder recuperar tu contabilidad es que me pagues el mantenimiento, y si no quieres pues te las apañas con Hacienda”. No quiero ni pensar cuántas empresas habrán pagado este impuesto revolucionario cuando se han encontrado que a pocos días vista hay que presentar las declaraciones pertinentes al erario público.

No olvidemos que el cliente YA PAGÓ el programa cuando lo compró, y precisamente los de SAGE no son, ni mucho menos, los más baratos del mercado (más bien lo contrario). Y ojo, soy el primero que entiende que no es culpa del desarrollador que el disco duro del portátil se rompa, los tenderos somos los primeros que comprendemos que no todo entra en garantía. Pero hay dos consideraciones importantes:

– La primera, es que para casos como éste se podría imponer una tarifa asequible (por las molestias) si no quieres hacerlo gratis. Esto creo que no le parecería mal a casi nadie, y cuando digo asequible me refiero a un máximo de 50 euros (como muy mucho, siendo razonable para mí de 20 a 30 euros). Por supuesto, para los clientes que tienen el mantenimiento contratado tiene que ser gratis.

Hace mucho que no me compro ningún videojuego para PC, pero creo recordar que antes era normal encontrar un teléfono de atención al cliente donde se podía preguntar dudas sobre la instalación o funcionamiento del juego en cuestión. Y un juego no cuesta 600 euros ni de lejos.

– La segunda es que estamos en un mercado en el que la piratería es un mal endémico. No podemos creer que la manera de convencer a un cliente para que compre un original es dejarlo tirado a la primera de cambio, incluso yo diría que en casos como este se pretende estafarlo. El Tendero lo explica muy bien en su artículo. No señores de SAGE, este no es el camino, es muy fácil que sus directivos no dejen de llorar en revistas del sector de lo malos que son los consumidores que no pagan por sus productos y los bajan del Emule. Es muy fácil invertir ingentes cantidades de dinero en protecciones anticopia y en entidades de derechos de autor. En definitiva, es muy fácil ser como los burros que les pones una zanahoria delante y sólo saben ir en una dirección.

Lo difícil, lo realmente difícil, es (por desgracia) hacer las cosas bien. En invertir en calidad, en desarrollo y sobre todo en atención al cliente. Esto, aunque parezca mentira, lo sabemos mejor los pequeños empresarios que los grandes, porque a éstos la grandeza les va poniendo una venda en los ojos que les impide ver más allá de las paredes de su despacho. Es algo tan fácil como esto: un cliente contento repetirá y te traerá más clientes, un cliente descontento lo contrario. Un buen amigo mío me decía cuando estaba a punto de abrir la tienda: “recuerda esto, un cliente satisfecho te traerá otro cliente, un cliente insatisfecho te quitará diez clientes”. Sabias palabras que no muchos tienen en cuenta.

En nuestro caso particular, hace años que no vendemos ni Eurowin, ni Contaplus, ni Facturaplus, ni ninguno de estos software famosos (o no tanto) que hacen la vida imposible al cliente cuando hay algún problema. Apostamos por otras soluciones que no piden ni clave de activación ni nada que suponga un incordio, y que son lo bastante potentes para cualquier empresa media. Cuando a un cliente se le ha “roto” el sistema operativo o el disco duro, es tan fácil como volver a instalar el programa y luego pegar encima la carpeta anterior y todo queda como estaba al milímetro. Un gustazo tanto para el cliente como para nosotros. Y baratito que no veas.

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Juanjo

Me llamo Juanjo y en un sucinto resumen se podría decir que soy un informático adicto a las series, el cine y la lectura, además de apasionado por los ordenadores, móviles, gadgets, internet, videojuegos… lo que viene a ser un geek ;).