Mediodía, te encuentras saliendo del trabajo en tu coche dirección a casa, justo cuando te dispones a entrar en el carril de incorporación a la autovía notas cómo el teléfono empieza a sonar, sabes que no es el momento de contestar ni de ver quién es, por lo que el teléfono, sabiendo que estás ocupado/a, desvía directamente la llamada al buzón de voz. Ahora que tu smartphone sabe que no estás conduciendo, te muestra un mensaje informando de quién era la llamada y automáticamente te propone devolvérsela.
Ya puedes estar quitando el precinto a tu nuevo iPhone 5, Samsung Galaxy S4 o similar, que todo el primer párrafo no tiene nada que ver con la realidad, pues desafortunadamente nuestros terminales aún no cuentan con esta tecnología. Si no eres un imprudente al volante, cuando veas la llamada dejarás que siga sonando hasta que salte el buzón o harás lo posible por rechazarla, cuando llegues a casa, mirarás a ver quién ha sido e intentarás devolver la llamada, si te interesa. Todo esto, a través de botones y deslizamientos por pantalla.